De algunos documentales que he tenido oportunidad de ver, este hace una presentación clara y precisa de la problematica del agua para consumo humano en la tierra.
Ahora que el COVIT-19 muestra la fragilidad de nuestra existencia, este documental es más que oportuno para recordarnos que todos los recursos que podamos poser, de nada nos servirán si el destino nos alcanza en materia de agua para consumo humano.
Evidententemente que sin agua no hay vida, pero notablemente también: Sin bosques no hay agua. No porque los bosques produzcan agua, si no porque regulan el ciclo del agua dulce en la tierra.
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